Proyecto FONDEF busca disminuir fatiga y somnolencia en conductores del transporte de carga

La Facultad de Ciencias de la Universidad de Valparaíso está desarrollando un innovador proyecto a nivel mundial denominado “Validación de un protocolo de manejo de luz y oscuridad para modificar el reloj biológico de conductores durante los turnos nocturnos con el fin de mejorar su desempeño y salud”, financiado por el Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDEF) y el Grupo Artisa, en el que también participa la empresa AlertPlus.

Este proyecto apunta directamente a generar mejores condiciones de alerta y activación en los conductores de turnos nocturnos, por medio de nuevos métodos y tecnologías. Liderado por el Grupo Artisa, que ejecuta exigentes operaciones nocturnas en la División Salvador de Codelco, el proyecto ejecutado por la Facultad de Valparaíso a través del Instituto de Neurciencias, gracias a un FONDEF, busca beneficiar la salud de los conductores y salvar vidas, en un sector muy relevante de la economía.

El estudio parte de la base de que el ser humano es una especie diurna, por lo que trabajar de noche impide tener un sueño reparador durante el día. Así muchos trabajadores de turno nocturno sufren de somnolencia, lo cual aumenta el riesgo de errores, fallas y accidentes.

Arturo Moraga, subgerente corporativo de Artisa, explicó que “hasta hoy, la problemática de la fatiga y somnolencia en conductores ha sido tratada a nivel mundial con medidas reactivas, con dispositivos centrados en la detección (ante el pestañeo, bajada de la mirada, etc.) y con aplicación de acciones paliativas ante este escenario (dormir, tomar café, lavarse la cara, etc.). Este proyecto busca atender la problemática con medidas que permitan gestionar la aparición del problema, más que una reacción”.

John Ewer, doctor en Neurociencias e investigador de la Facultad de Ciencias de la UV, quien encabeza este proyecto junto a los investigadores Marcela Mondaca, Liliana Bustos y Mauricio Aspé, explica la lógica de la intervención que implementarán: “Imaginemos que los conductores vivieran en Australia, pero trabajaran en Chile. Ellos trabajarían de noche (en Chile) sin problemas, ya que, al estar ambos países en horario invertido, sus cuerpos estarían de día durante su turno de trabajo nocturno. Y al final de su turno sus cuerpos estarían de noche, por lo que no tendrían dificultades en conciliar el sueño ¡Pero obviamente no es posible hacer esto! Entonces, lo que estamos haciendo es replicar algo parecido a estar en Australia, pero estando en Chile: jugando con la exposición a la luz y a la oscuridad, de tal manera que el reloj biológico de los trabajadores se desplace, evitando la somnolencia de noche y el sueño fragmentado en el día”.


De esta forma, en enero de 2023, el grupo de investigadores viajó hasta la División Salvador de Codelco para iniciar el trabajo en terreno reclutando en primera instancia a 45 voluntarios, conductores profesionales que, actualmente, realizan turnos de día y noche en dicha faena.

A los voluntarios se les aplicarán “protocolos que se han afinado 15 ó 20 años, en trabajos de manera controlada, como clínicas de sueño o de laboratorio. Se les aplica luz fuerte controlada, en momentos muy específicos de la noche y se les reduce la exposición a la luz solar en la mañana, para así ir retrasando el reloj biológico para que el trabajo nocturno se haga menos difícil y que saliendo del turno les dé sueño naturalmente”, explica Ewer.

Todo esto tendrá medidas adicionales de apoyo, entre ellas, mediciones del estado de alerta, utilizando una aplicación móvil desarrollada por AlertPlus, la regulación de la alimentación antes de dormir, gestionar la oscuridad y reducir el ruido de los lugares de descanso durante el día y la utilización de tecnología de la NASA para la medición permanente de la temperatura corporal.

“La intervención que estamos haciendo ofrece una solución permanente al problema de la somnolencia, porque cambia el horario del sueño y vigilia del cuerpo. Eso, a diferencia del café o soluciones que mejoran tu estado de alerta de manera muy temporal; o tomar pastillas para dormir al salir del turno, en el caso inverso”, agrega el investigador.El estudio contempla diversas etapas, esperando ser concluido exitosamente a fines de 2024. A futuro, los protocolos desarrollados podrían ser adoptados de manera permanente por el Grupo Artisa, y adaptados a otros rubros que tengan turnos extendidos de trabajo nocturno, que en Chile representan en la actualidad cerca del 20% de la fuerza laboral, muchos de ellos en áreas de gran importancia económica para Chile, como la minería y el transporte.